Los Pumas: paso en falso
En una nueva columna, Sebastián Perasso, analiza la derrota de Los Pumas en el primer Test Match con Inglaterra en Salta.
Los Pumas se presentaron en esta temporada 2013 con una actuación tan pobre como inesperada. La caída frente a Inglaterra por 32 a 3 en la ciudad de Salta significó un paso en falso en su etapa de crecimiento y consolidación.
El rugby es un deporte complejo. Por ello, quien busque alcanzar el éxito deberá atender un sinnúmero de circunstancias, ya que en los pequeños detalles muchas veces se resuelve un partido y se decide el resultado.
No obstante esa complejidad y las circunstancias que lo rodean, siempre se debe volver a lo más básico o simple para sostener actuaciones convincentes.
En el estadio Padre Martearena, Los Pumas corroboraron que sin una buena obtención y sin una defensa sólida cualquier plan de juego se desvanece.
Algo básico pero enteramente aplicable a cualquier equipo, incluso en lo que respecta a la alta competencia.
Por otra parte, está comprobado que los equipos argentinos que no pueden exhibir sus fortalezas históricas fracasan estrepitosamente en el campo de juego.
En ese sentido, nuestro seleccionado nacional tuvo una defensa desprovista de agresividad, pasiva y vulnerable, además de un marcado déficit en las formaciones fijas (scrums y line outs).
Los números estadísticos reflejan con claridad el derrumbe de nuestro equipo. Solo en el primer tiempo, Los Pumas recibieron 3 tries, tuvieron 12 tackles fallidos y 9 pérdidas de posesión en la hilera. Un panorama desalentador para construir desde allí actuaciones, por lo menos, aceptables.
Está claro que Los Pumas son Pumas porque contagian entusiasmo y valentía, porque se sobreponen a las adversidades, porque cuentan con una defensa agresiva y pasional, y porque poseen un scrum dominante.
Sin esas fortalezas, el conjunto argentino pierde su elemento distintivo y se transforma en un equipo limitado y vulnerable.
El sábado próximo en la cancha de Vélez, nuestros Pumas tendrán la chance de reivindicarse, de ser un equipo reconocible más allá de un triunfo o una derrota.
El objetivo está latente y a la vista de todos. Ya no se trata de imponer un plan de juego, sino sencillamente de recomponer nuestras fortalezas históricas.
0 comentarios »
Dejá tu comentario...
Añade tu comentario abajo, o trackback desde tu propio sitio. También puedes suscribirte a estos comentarios vía RSS.
Mantener siempre respeto y cordialidad. No spam. Gracias.